La creación del Fondo Verde propuesto por el gobierno de México para financiar acciones para enfrentar el cambio climático en los países en desarrollo ha encontrado reparos en las discusiones sobre el tema que tienen lugar en Durban, Sudáfrica. Aunque la mayoría de los países participantes en la COP17 se han pronunciado por adoptar ya decisiones que permitan poner en marcha el fondo, cuyo diseño general fue aprobado en Cancún a finales de 2010, Estados Unidos, Arabia Saudita y Venezuela -en nombre de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA)- han expresado reservas por diferentes motivos. De acuerdo con participantes en la cumbre, la representación estadounidense considera que el proyecto presentado por un comité transitorio creado hace un año para establecer las bases del mecanismo, contiene inconsistencias, mientras que Venezuela cuestiona la intervención del Banco Mundial en su puesta en operación y Arabia Saudita plantea que el fondo sólo se nutra con recursos públicos. Los cuestionamientos llevaron a que la presidenta de la sesión de la COP17 en la que se abordó el tema, la Canciller sudafricana Maite Nkoana-Mashabane, llamara a consultas informales a puerta cerrada.
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